Battletech: Dos partidas a Alpha Strike

El pasado sábado pudimos estrenar parte de los mechs que he pintado para Battletech, con un par de partidas a Alpha Strike.

3025, Cuarta Guerra de Sucesion. El Condominio Draconis ha lanzado un asalto combinado sobre el planeta Kobe, de la Mancomunidad de Lira, asaltando desde Tannhauser e Hyperion. Fuerzas de la Segunda Espada de Luz del Condominio se enfrentan al 10º Regimiento de Guardias de Lira

Lejos de las lineas del frente principal, dos lanzas Kurita y Stenier en mision de reconocimiento se encuentran cerca de la pequeña ciudad de Port Moresby. Con el enemigo identificado, no queda sino eliminarlo...

Para estas partida, hice dos listas usando la Master Unit List. 

Las fuerzas Kurita, de la Segunda Espada de Luz, eran estas

Las fuerzas Steiner, del 10º de Guardias de Lira, eran estas

Como ibamos a jugar partidas introductorias, no introduje reglas especiales de Mechwarriors, y solo introduje que ambos jugadores elegiríamos un teniente que tendría Habilidad 3, y que dispondríamos de la habilidad de una Lanza Básica consistente en seis habilidades "Lucky", que en esencia son seis repeticiones de tirada por partida.

La primera partida sería la batalla introductoria que menciono arriba, con una lanza por jugador. Los Kurita tendrían un Locust, un Shadow Hawk, un Marauder que sería el teniente, y un Gunslinger. Los Steiner tendrían un Commando, un Wolverine, un Archer que sería el teniente y un Highlander.

Este es el tablero que monté, usando los edificios de Alpha Strike

Y las lanzas de combate

Como siempre, la partida comienza posicionando a los mechs para enfrentarse al enemigo.

En el segundo turno o así, Iván cometería un error y movería su Commando, el Mech ligero, a línea de vista de mi Gunslinger. Pese a ser un disparo a larga distancia, el Kurita impactaría y los cinco puntos de daño entrarían todos, reventando al battlemech Steiner. Primera sangre para el Dragón.

Es importante comentar que, aunque no metimos demasiadas reglas especiales, jugamos con una opcional de daño. En vez de aplicar todo el daño del arma por impacto, se tira un dado por punto de daño y este daño se aplicaba con 3+. Esto le dio a la partida mas duración ya que si no, la letalidad de Alpha Strike haría que los mechs hubiesen caido rápidamente como moscas. Tras haber jugado las dos partidas, creo que esta regla es importante en partidas con pocas minis, y prescindible en batallas masivas.

Con un Battlemech menos, los Steiner empezaron a jugar a la defensiva. Mi Shadow Hawk se movería para disparar al Archer por la espalda, reventándolo, aunque a cambio terminaría siendo destruido también por los Steiner

Poco a poco, los Kurita irían reduciendo la integridad de los Mech Steiner, y la guinda fue el humilde Locust, abajo a la derecha, que en dos turnos de maniobra se colocaría detrás del Highlander Steiner y terminaría por destruirlo.

La batalla terminó con victoria total del Condominio Draconis, y para la segunda partida decidimos añadir más miniaturas. Dos Mechs más por bando (Warhammer y Wolverine para los Kurita, y Griffin y Thunderbolt para los Steiner). Además, los Kurita contarían con dos unidades de armaduras de combate, y los Steiner con dos tanques Scorpion.

En esta partida jugaríamos un escenario de "Capturar la Bandera". Cada fuerza debía avanzar en territorio enemigo, hacerse con el objetivo, y llevarlo de vuelta a su zona del tablero. Los objetivos están marcados en la foto de abajo.

La elección de escenario fue poco apropiada para mi, ya que mis tropas de infantería no hicieron nada en toda la partida y esto le dio a los Steiner una ventaja que se terminaría haciendo notable. Yo desplegué la infantería en el objetivo con la intención de defenderlo ante cualquier avance enemigo, y me dividí en dos grupos: uno que intentaría conquistar el objetivo enemigo por la derecha, y otro que defendería mi base. El primer turno empezó agresivo y nuestros respectivos tenientes se sacudirían de lo lindo, aunque mi Warhammer terminó mucho peor parado y acabó con sólo tres puntos de estructura y daños en el armamento, dejandolo también fuera de la partida a todos los efectos.

A partir de ahí el lado izquierdo se convirtió en un tiroteo sin más ganas de avanzar, mientras que yo comencé a usar una peana de infantería para avanzar hacia el objetivo junto con un grupo de tres mechs.

Aquí pequé de poco prudente, y aunque conseguí destruir un tanque Steiner, Iván comenzó a replegar sus tropas hacia el edificio objetivo. Destruiría a disparos el edificio en el que se refugiaba mi infantería de vanguarda, destruyéndola, dejaría a mi Locust prácticamente destruido, y comenzaría a machacar a mi Gunslinger y mi Marauder que, aunque dañaban al enemigo, no conseguían destruir ningún Battlemech, y aquí la ausencia de dos unidades con daño extra se empezaba a notar mucho.

Iván replegaba a todos sus Mechs hacia el objetivo, y acabaría destruyendo mi Gunslinger, pero mi Marauder saltaría sobre el objetivo aguantando un turno de fuego granizado pero haciéndose con él.

Como suele pasarme, al final de la partida ya se me olvida hacer fotos, así que sólo puedo contarlo de palabra. El Marauder saltaría del edificio para ganar puntos de Evasión e intentar ganar la partida, pero los Steiner en plena superioridad numérica se le echarían encima y lo destruirían. El objetivo queda ahora entre los restos del Marauder. Con toda mi fuerza prácticamente destruida, decidí hacer la machada de esprintar a mi Wolverine, que conseguiría llegar al objetivo, sobrevivir a cuatro tandas de disparos sin comerse ni uno, y escapar con el objetivo, solo para ser asaltado por el Griffin y el Highlander Steiner que lo harían papilla. El resto de la fuerza Steiner destruyó el edificio objetivo Kurita y arrasaría a los sobrevivientes, ralentizando así la invasión del Condominio en este sector del planeta...

Los perros Steiner han tenido suerte esta vez, pero la Segunda Espada de Luz ha peleado con honor y el Dragón tendrá su venganza en breve.

Por mi parte, solo puedo decir que Alpha Strike no me ha decepcionado. El juego es muy táctico, obligándote a pensar muy bien los movimientos y castigándote si juegas, como hice yo, de forma arriesgada. Las reglas son sencillas pero con profundidad, y a la mitad de la segunda partida ya ni siquiera necesitabamos mirar las tablas excepto para los impactos críticos.

Espero tener la oportunidad de volver a jugar más partidas en el futuro...